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El aplauso del público no llena las arcas del teatro (REVISTA LIDERES)
Los mayores de 18 años son los principales consumidores de estos espacios. La producción y el alquiler son sus soportes.
Fernando Mendoza / Redacción Quito / LÍDERES
fmendoza@revistalideres.ec
archivo / LÍDERES
Sergio Mercurio, el titiritero de Banfield, actuó en febrero de 2007 en el Teatro Sucre, de Quito. El local estuvo lleno.Se abre el telón y se escuchan los aplausos. Los actores tienen al público al frente y la obra está por empezar. Todos salen con la misma consigna, ‘romperse una pierna’, es decir que el show sea un éxito, agradar al público y mejorar la taquilla.En Quito existen 15 teatros, entre independientes y subsidiados por el Gobierno y el Municipio. Las personas mayores de 18 años e identificadas con la cultura son los principales visitantes de las salas. Estos espacios se alquilan, pero también trabajan en producción y coproducción de obras. Además, montan presentaciones que se financian con las taquillas.El Teatro Nacional de la Casa de la Cultura depende del Gobierno y tiene capacidad para 1 820 personas. La CCE también tiene bajo su tutela al Ágora de la Casa de la Cultura, al teatro Prometeo y a las salas Benjamín Carrión, Demetrio Aguilera Malta y Jorge Icaza.Según Víctor Gallegos, director de Teatros de la CCE, los espacios sobreviven gracias al dinero del Estado y a los valores cobrados por su alquiler. La renta del Teatro Nacional cuesta USD 4 500 diarios. En 2009 se hicieron 200 funciones.Otro espacio para el arte lo maneja la Fundación Teatro Sucre, subsidiada por el Municipio de Quito. Su presupuesto anual bordea los USD 2 millones. Según Stalin Lucero, coordinador de Producción, en cada presentación el Sucre se queda con el 40% de la taquilla; el artista recibe el 60%. La Fundación también maneja los teatros México y Variedades. Además, la sala de la Fundación (para exposiciones) y el Café del Teatro.“La Fundación no alquila los espacios, los auspicia. Cuando se trata de un artista internacional se conversa con las embajadas para que venga y que sus costos se reduzcan”, explica Lucero. Además, en el Sucre se producen y coproducen eventos. El dinero no es la meta de la Fundación. Las obras son analizadas por su Directorio y dependiendo de su ‘valor cultural’ se las presenta. El Teatro Sucre recibió a 214 390 asistentes durante 2008. La Red de Teatros Independientes es una entidad creada hace ocho años. Ocho y Medio, Corporación Patio de Comedias, Fundación Teatro Bolívar, Frente de Danza Independiente, Zero no Zero, Asociación Humboldt, Fundación Cultural Humanizarte, Malayerba y Teatro Universitario forman parte del gremio. Juana Guarderas, del Patio de Comedias, cuenta que se vive de la taquilla y de los convenios con la empresa privada. El año pasado facturó unos USD 13 000 y realizó un promedio de 10 obras.El Centro Comercial Iñaquito también tiene su sala: El Teatro. En ella se realizan producciones, coproducciones y sus instalaciones son alquiladas para eventos empresariales y para grupos de teatro que desean presentar sus obras.Cristina Rodas, productora de El Teatro, explica que sus salas se llenan en especial entre enero y abril, pero en septiembre casi no hay público por la temporada vacacional. Esta sala tiene capacidad para cerca de 190 personas. El Teatro facturó un promedio de USD 120 000 en 2009. Según los entrevistados, no hay un dato consolidado de consumo cultural. La industria es débil, señalan, pero la función debe continuar.
FESTIVAL ECUADOR JAZZ 2010
Redacción Cultura
EL COMERCIO
8 DE MARZO DE 2010
Ayer, en la Plaza del Teatro se llevó a cabo el concierto de clausura del Festival Ecuador Jazz con la actuación de cuatro bandas. El Kristian Brink Quartet, de Suecia, fue el encargado de abrir la jornada. El cuarteto sueco cautivó a un público variado con sus baladas melódicas cargadas de swing.
7 000personasfue el número aproximado de asistentes para las diferentes actividades del festival.
El trío de Julien Brunetaud, de Francia, fue el siguiente grupo en este despliegue de propuestas musicales. Desde el piano, la batería y el contrabajo regalaron una presentación alegre y dinámica.Música Nuda tuvo su segunda presentación en este festival. El dúo italiano enamoró a los presentes con su particular estilo interpretando canciones clásicas de diversos géneros.Acompañados por el bajo y la voz de Petra Magoni, el dúo fue aplaudido por un público dispuesto a escuchar nuevas propuestas musicales.La banda colombiana Puerto Candelaria tuvo el cierre del festival en sus manos. El grupo, que ya se había presentado anteriormente en este festival, tuvo gran acogida y fueron despedidos, con gran entusiasmo.Stalin Lucero, jefe de producción del Festival Ecuador Jazz, cuenta que, en general, el balance del evento es muy positivo. “Lo más importante es que arrancamos el lunes con una asistencia de 500 personas aproximadamente”, dice. Ese día se presentó D’3, de España.“La concurrencia de gente fue más o menos la misma todos los días. El jueves, con la presentación de Música Nuda, el teatro estuvo lleno en un 80%. El día que más gente hubo fue el viernes, en el que se presentaron Puerto Candelaria y Mango Blue. El teatro estuvo completamente lleno”.Sin embargo, dice Stalin, este balance es únicamente del Teatro Sucre, pues en el Teatro México, las cifras fueron distintas. La concurrencia de gente fue mayor. Más o menos unas 600 personas por día. La asistencia a las clases magistrales también fue importante. Diariamente hubo entre 80 y 90 personas; a todas, como forma de incentivo, se les regaló pases para los conciertos.“Hoy (ayer), en este concierto de clausura, esperamos tener un público circulante de 2 000 personas”, comenta.Andy Sebastiá, experto en música, dijo que “este festival está a la par de cualquier festival del mundo. El buen momento y el buen gusto llegaron al Ecuador. El evento estuvo cargado de músicos increíbles de gran nivel desde el primer día”.
EL COMERCIO
8 DE MARZO DE 2010
Ayer, en la Plaza del Teatro se llevó a cabo el concierto de clausura del Festival Ecuador Jazz con la actuación de cuatro bandas. El Kristian Brink Quartet, de Suecia, fue el encargado de abrir la jornada. El cuarteto sueco cautivó a un público variado con sus baladas melódicas cargadas de swing.
7 000personasfue el número aproximado de asistentes para las diferentes actividades del festival.
El trío de Julien Brunetaud, de Francia, fue el siguiente grupo en este despliegue de propuestas musicales. Desde el piano, la batería y el contrabajo regalaron una presentación alegre y dinámica.Música Nuda tuvo su segunda presentación en este festival. El dúo italiano enamoró a los presentes con su particular estilo interpretando canciones clásicas de diversos géneros.Acompañados por el bajo y la voz de Petra Magoni, el dúo fue aplaudido por un público dispuesto a escuchar nuevas propuestas musicales.La banda colombiana Puerto Candelaria tuvo el cierre del festival en sus manos. El grupo, que ya se había presentado anteriormente en este festival, tuvo gran acogida y fueron despedidos, con gran entusiasmo.Stalin Lucero, jefe de producción del Festival Ecuador Jazz, cuenta que, en general, el balance del evento es muy positivo. “Lo más importante es que arrancamos el lunes con una asistencia de 500 personas aproximadamente”, dice. Ese día se presentó D’3, de España.“La concurrencia de gente fue más o menos la misma todos los días. El jueves, con la presentación de Música Nuda, el teatro estuvo lleno en un 80%. El día que más gente hubo fue el viernes, en el que se presentaron Puerto Candelaria y Mango Blue. El teatro estuvo completamente lleno”.Sin embargo, dice Stalin, este balance es únicamente del Teatro Sucre, pues en el Teatro México, las cifras fueron distintas. La concurrencia de gente fue mayor. Más o menos unas 600 personas por día. La asistencia a las clases magistrales también fue importante. Diariamente hubo entre 80 y 90 personas; a todas, como forma de incentivo, se les regaló pases para los conciertos.“Hoy (ayer), en este concierto de clausura, esperamos tener un público circulante de 2 000 personas”, comenta.Andy Sebastiá, experto en música, dijo que “este festival está a la par de cualquier festival del mundo. El buen momento y el buen gusto llegaron al Ecuador. El evento estuvo cargado de músicos increíbles de gran nivel desde el primer día”.
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